Con una renovada plantilla, donde somos muchas las nuevas incorporaciones, nos desplazamos hasta la cancha de Maristas (en Triana) invitados por un nuevo equipo donde hay cuatro “ex-Gines”.
Por diversas causas solo pudimos acudir 9 jugadores (Juanma, Alejandro, Scott, Pedro, Pablo, Jaime y yo, más Adrián que llegó en el tercer cuarto y nuestro “capi”, Oscar, que se resintió de su lesión en el gemelo e hizo de entrenador) Algunos, bastante tocados por el resfriado (yo mismo y Juanma)
Sorprendentemente, hasta para nosotros, salimos muy concentrados e intensos y rápidamente adquirimos importantes ventajas en el marcador que gestionamos bien hasta el final, pese a un mal último cuarto. Si la memoria no me falla, el resultado final fue de 38-56 para nosotros.
En esta ocasión, nos basamos (especialmente en los momentos complicados) en el juego interior. Metimos muchos balones dentro, donde Juanma y Adrián hicieron un excelente trabajo. En defensa hubo labor colectiva y pese a algunos despistes que nos costaron contraataques y 2+1, dejamos a los contrarios con un marcador bajo. Mucho tuvo que ver la excelente dirección a pie de pista de Oscar.
Jugamos cuatro cuartos a reloj corrido. Sin árbitros, con algo de dureza pero de forma noble.
Personalmente me encontré muy cómodo, especialmente en el primer cuarto. En el tercero, en una desafortunada jugada, pisé a un contrario e hice un mal gesto con el hombro izquierdo las cervicales que me dejó bastante tocado. Pasé por el banquillo y cuando volví a entrar ya me había enfriado y no lo hice como me hubiese gustado, pero pudimos aguantar el resultado y eso es lo importante.
Felicitar a todo el equipo, pues todos aportaron y animarles a seguir en esta línea, acudiendo a los entrenamientos/pachangas para seguir aprendiendo a jugar juntos.